Paso 1: Limpieza Profunda

La limpieza es el primer y más importante paso en tu rutina de belleza. Lo recomendable es hacer una doble limpieza en profundidad: utiliza agua micelar, para eliminar los restos e impurezas, o un aceite limpiador mientras masajeas tu rostro. Acto seguido se aplicaría un limpiador en formato gel o en pastilla que sea suave y adecuado para tu tipo de piel. No olvides limpiar también el cuello.

Paso 2: Exfoliación (1-2 veces por semana)

La exfoliación es esencial para eliminar las células muertas de la piel y promover la renovación celular. Utiliza un exfoliante suave y evita la fricción excesiva. Lo más recomendable es hacerse con un exfoliante químico. No sigas este paso todos los días para no irritar la piel, una o dos veces por semana es suficiente.

Paso 3: Tónico Facial

Aplica un tónico facial para restaurar el equilibrio del pH de tu piel y prepararla para los productos posteriores. Los tónicos también ayudan a minimizar la apariencia de los poros y a refrescar la piel.

Paso 4: Sérum

Los sérum son productos concentrados que ofrecen beneficios específicos para la piel. Elije uno que se adapte a tus necesidades, como hidratación, reducción de arrugas o iluminación. Aplica el sérum en pequeñas cantidades y déjalo absorber antes de continuar.

Paso 5: Crema de Ojos

La piel alrededor de los ojos es delicada y propensa a las arrugas. Aplica una crema de ojos específica con movimientos suaves para mantener esta área hidratada y cuidada.

Paso 6: Hidratante

La hidratación es clave para mantener la piel suave y flexible. Usa una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel y asegúrate de cubrir toda la cara y el cuello. Una buena opción es optar por una con acción antiarrugas que hidrate y regenere tu piel al mismo tiempo.

Paso 7: Protector Solar (mañana)

El protector solar es de los productos más importantes en tu paso a paso de la rutina de belleza definitiva para proteger tu piel de los daños causados por los rayos UV. Es súper importante que sea de protección alta (SPF50+) y que te la apliques todos los días y si puedes cada 2 horas. Opta por una de textura ligera que se absorba fácilmente. También existen en formato bruma para reaplicarla durante el día encima del maquillaje o de una forma más fácil cuando no tenemos tiempo. Hazlo incluso en los días nublados.

Paso 8: Mascarillas (1-2 veces por semana)

Las mascarillas ofrecen un impulso adicional a tu piel. Usa mascarillas hidratantes, purificantes o iluminadoras según tus necesidades. Sigue las instrucciones del producto siempre y no te excedas del tiempo recomendado para no irritar tu piel.

Paso 9: Cuidado Nocturno

Por la noche, la piel se renueva naturalmente. Por eso es importante que vuelvas a hacer todos los pasos de los que hemos hablado, excepto la exfoliación si ya se ha realizado (puedes hacerlo por la noche en vez de por la mañana) y la crema solar al no ser ya necesaria. También puedes usar productos específicos como cremas hidratantes nocturnas o tratamientos para maximizar estos procesos de reparación.

Paso 10: Descanso y Alimentación

No subestimes el poder del descanso y una alimentación equilibrada. Dormir lo suficiente y consumir una dieta rica en nutrientes contribuye significativamente a una piel saludable.

Recuerda que cada piel es única, así que ajusta esta rutina a tus necesidades y prueba diferentes productos para encontrar los que mejor funcionen para ti. La constancia es clave, así que sigue esta rutina de belleza de forma regular y ¡prepárate para lucir una piel radiante y saludable! En nuestras tiendas como Druni, Atalaya o Primor puedes encontrar una gran variedad de productos para que los incluyas en tu rutina de belleza definitiva.