Estamos en temporada de castañas y queremos que se note en nuestras cocinas. La temporada de este fruto empieza en octubre y se prolonga hasta diciembre, así que hay que aprovechar y emplearlo al máximo en nuestras elaboraciones de otoño. Aunque podemos comer castañas de muchas formas: crudas, asadas, cocidas, confitadas, en almíbar… Desde Luz del Tajo te proponemos una tarta de castañas y chocolate. ¿Te animas a prepararla con nosotros?

Elegir la materia prima

Antes de nada, aprendamos un poco sobre este alimento. Las mejores castañas son las de consistencia dura y piel de un color pardo brillante, ten eso en cuenta a la hora de elegirlas. Nutricionalmente, estamos ante un fruto seco muy rico en hidratos de carbono y fibra, así como en vitaminas del grupo B y minerales como el magnesio, potasio, hierro y fósforo. Además, dado su alto contenido en agua es un fruto con un bajo contenido en grasas.

Receta de tarta de castañas y chocolate

Para nuestra elaboración, vamos a seguir la receta del blog de cocina Webosfritos, ya que es una propuesta, además de deliciosa, fácil de preparar y con ingredientes que todos podemos tener en casa. Anímate a cocinarla con los niños de la casa.

La castaña aporta un dulzor y una textura muy especial a los postres. Además, es un espesante natural muy bueno. Por eso, hay que muchos postres que llevan puré de castañas y no precisan harina. A pesar de eso, el resultado es especialmente jugoso.

La lista de ingredientes

• 300 gr de castañas.
• Suficiente cantidad de leche para cocer las castañas que queden cubiertas por ella.
• 160 gr de una tableta para chocolate a la taza.
• 100 gr de azúcar.
• 100 gr de mantequilla.
• 50 ml de leche.

Para el baño

• 100 gr de chocolate.
• Un poco de leche.

Para el adorno

• Castañas cocidas.
• Un poco de chocolate fundido.
• Unos frutos del bosque a tu gusto. Elige tus preferidos.

Preparación

Comenzamos quitándole la cáscara a las castañas y poniéndolas a cocer en leche. Una vez cocidas y tiernas, las escurrimos bien y les quitamos la piel. En este punto hay que trabajar deprisa, porque a medida que se van enfriando y secando es mucho más difícil quitar la piel.

Pasamos las castañas por un pasapuré o por una batidora hasta conseguir un puré. Por otro lado, ponemos en un bol la mantequilla y la ponemos unos segundos en el microondas para ablandarla. Añadimos a ese mismo bol el chocolate y, vigilándolo cada 15 segundos para que no se queme, fundimos también el chocolate en el micro.

A continuación añadimos el azúcar, el puré de castañas y los 50 ml de leche, dándole vueltas, hasta obtener una masa homogénea. Preparamos unos aros de emplatar untándolos por dentro con mantequilla. Verter el preparado de castañas y chocolate dentro, presionando bien para que no queden huecos. Meter en la nevera un par de horas. Pasado ese tiempo, desmoldamos empujando con otra superficie. Podemos utilizar un vaso recto cuyo diámetro sea un poco menor al del molde. Los vamos dejando en el plato donde vayamos a servir.

En un cazo, ponemos un poco de leche y la cantidad que deseemos de chocolate a la taza, dependiendo del baño que le quedamos dar. Hay que hacerlo a fuego medio y dándole vueltas con unas varillas para que no se queme. Servimos inmediatamente cuando consigamos la textura adecuada.

Para decorar, podemos dejar un par de castañas de las que hemos cocido en leche y hemos pelado para utilizarlas de adorno, junto con algún fruto rojo. Esto le dará color y un punto ácido muy agradable. ¡El resultado es delicioso!