¿Por qué hay que usar protección solar todos los días del año?

El sol es el mayor enemigo de nuestra piel. Además de provocar enfermedades graves, es el principal responsable del envejecimiento y la aparición de manchas en la cara y el cuerpo. ¿Te parecen pocos motivos para protegerte al máximo de las radiaciones solares? En este post de Luz del Tajo te vamos a explicar por qué debes usar protección solar todos los días del año, en otoño, invierno, primavera y verano, y cómo tienes que hacerlo para que sea eficaz. ¡Toma nota que arrancamos!

Junto con una correcta higiene, proteger la piel del sol es el mejor tratamiento de salud y belleza que podemos darle a nuestro cuerpo. Además, debemos ser especialmente constantes y cuidadosos con la protección solar en la piel del rostro, ya que el grosor en esta zona del cuerpo es más fino, lo que contribuye a hacerla más frágil y vulnerable a la radiación solar.

 

protección solar

 

Y recuerda que debes hacerlo todos los días del año, incluso cuando no hace sol y si vas a estar en una zona interior, ya que las radiaciones siguen estando presentes aunque no nos demos cuenta.

 

¿Cuánta protección solar aplicar?

Para la piel del rostro, la cantidad adecuada son dos líneas extendidas en dos dedos. En cuanto al cuerpo, un truco orientativo para saber cuánto producto echarse es usar el equivalente al contenido de un vaso de chupito o de dos cucharadas (unos 30 ml) para toda la piel que se vaya a exponer al sol.

En cualquier caso, es fundamental aplicar el protector solar de manera generosa, ya que, si al extenderlo sobre la piel queda una capa demasiado fina, el nivel de protección será menor.

 

protección solar

 

¿Debo reaplicar protección solar durante el día?

Otra de las dudas más consultadas es cada cuánto tiempo en necesario reaplicar la protección solar. Pues bien, lo recomendable es hacerlo cada 2 o 3 horas, ya que con el paso de las horas, disminuye la barrera de la crema. Así, el factor de protección solar de una crema protectora solo es completamente eficaz las dos horas después de ser aplicada.

También tienes que tener en cuenta, extender la protección un rato antes de que comience la exposición al sol. Lo ideal es hacerlo al menos media hora antes.

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