Consumir frutas y verduras frescos y de la estación tiene muchos beneficios, tanto para la salud, como para el medio ambiente y el bolsillo. La globalización hace que podamos comer sandía en invierno y naranjas en verano, pero eso no es lo natural. A continuación te vamos a explicar por qué debes comer frutas y verduras de temporada y te vamos a contar las que corresponden a otoño. Hacerlo tiene muchas más ventajas de lo que imaginas.

Cuando comemos frutas y verduras de temporada tenemos la certeza de que estás consumiendo alimentos que se han desarrollado cuando les correspondía de forma natural, atendiendo al clima de la zona en la que han sido cultivados. Es decir, se ha respetado el ciclo natural de crecimiento del producto. Seguir esta simple regla marcará una diferencia clave, ya que, además, proporciona a los productos sabores, aromas y texturas propios.

Al cultivarse con el clima que les resulta más propicio y poder completar su ciclo natural, al llegar el día de la recolección, las frutas y verduras de temporada conservan mejor sus propiedades nutricionales. Ni se ha forzado el cultivo para que estén listas en meses que no les corresponden, ni llevan tiempo esperando a ser comercializadas almacenadas en cámaras frigoríficas que les restan jugosidad, sabor y vitaminas.

Buenas para el bolsillo

Cuando consumimos una naranja en temporada, el tiempo que pasa desde que la fruta es recogida del árbol hasta llegar a tu casa se reduce al mínimo. Lo habitual es que no llegue a pasar por las cámaras de frío, lo que aumentaría su precio final, como ocurre cuando las compramos en agosto. Seguro que también eres capaz de encontrar diferencias en el sabor de una naranja comprada en agosto de otra adquirida en noviembre.

Además, si las verduras y frutas no son de cultivo ecológico, lo habitual es que contengan diversos residuos químicos derivados de plaguicidas o fertilizantes. Si el producto está cultivado fuera de temporada el uso de fertilizantes y productos artificiales se hace más necesario, ya que se está produciendo contra natura, forzando a la planta a crecer cuando el clima no le es favorable.

Frutas y verduras de otoño

Otoño: uva, granada, mango, castaña, naranja, mandarina, pomelo, kiwi, caqui, aguacate, acelga, boniato, calabaza, judía, berenjena, calabacín, pimiento, alcachofa, brócoli, espárrago y espinaca.

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